14-AGO-2014 Una sucursal “50” supuestamente inexistente, 2.141 cuentas sin un CUIT verdadero o con CUIT genérico en paralelo y acreditaciones por $ 9.700 millones con presuntas inconsistencias entre 2008 y 2012. Esto es lo que investiga la Justicia en el banco HSBC, con impulso de la querella de la AFIP, bajo sospecha de ofrecer una plataforma para facilitar la evasión y el lavado de dinero. Ayer se hicieron cuatro allanamientos en el marco de la causa judicial. Parte de los papeles que se buscaban se habrían quemado en el incendio del depósito de Barracas de Iron Mountain, pero las pruebas informáticas y los testigos serían contundentes.
La evasión sería de impuesto al cheque, Ganancia e IVA, con lo que se superarían los $ 5.400 millones, y la causa caería de lleno en la Ley Penal Tributaria, aunque todavía no hay funcionarios del banco individualizados como responsables de supuestas maniobras.
El HSBC es uno de los bancos que negociaba, al menos hasta ayer cuando Aurelius dio por cerrada esa instancia (ver pag. 4), con los fondos buitre el arreglo de la deuda en default.
La entidad declaró que “en el marco de una investigación judicial originada en una denuncia presentada por AFIP, HSBC Bank Argentina S.A. ha aportado al juzgado la documentación relativa a los clientes que le fuera requerida. El Grupo HSBC colabora y colaborará con la Justicia y los reguladores en su labor de hacer cumplir las legislaciones vigentes en cada jurisdicción en que opera”.
Los allanamientos ordenados ayer por la jueza en lo penal tributario Nº 3 María Verónica Straccia son la segunda tanda de medidas judiciales como éstas que recaen sobre el banco en esta causa, caratulada “HSBC Bank Argentina S.A. y otros” (por lavado de dinero). Los primeros tuvieron lugar en enero de 2013.
La acusación contra el HSBC surge porque el banco supuestamente no habría informado correctamente en el Sistema de Información de Transacciones Relevantes (Siter) las operaciones de esas 2141 cuentas, sino mediante CUIT genéricos, o a veces, con un CUIT verdadero que canaliza escasas operaciones de bajo monto, mientras que el resto del movimiento pasa por el CUIT genérico (falso). Según fuentes oficiales que prefirieron hablar en off the récord, esto vulneraría la normativa de “conozca a su cliente” que deben cumplir las entidades financieras y serían maniobras de lavado de dinero.
De las 2141 cuentas sospechosas, han sido puntualmente investigadas y se encontró que son falsas unas cinco, dos usinas de facturas apócrifas, una usuaria de esos papeles y dos firmas con cuentas bancarias fantasma. Ese entramado fue la punta de lanza que llevó a encontrar la supuesta sucursal inexistente del HSBC y los CUIT genéricos, y llegó a mover $ 392 millones en sólo 6 meses. El resto de las cuentas puede ser de empresas falsas o de firmas reales que lavan dinero. La investigación recién comenzará con las carpetas que colectó ayer la AFIP.
Los allanamientos se llevaron a cabo ayer a la mañana en la casa matriz del banco, Florida 201, y también en las sedes de Avellaneda y Caseros. A última hora de la tarde hubo una cuarta medida de este tipo en un depósito de La Boca que la jueza Straccia habría decidido sobre la marcha.
Fuente: cronista.com.ar