15 Jun 2015. Junio llega con un incentivo extra para los bolsillos de los trabajadores en relación de dependencia. Medio aguinaldo o medio salario adicional, y un sueldo completo para algunos afortunados cuyos empleadores tienen como práctica pagar doble esta obligación. Pesos excedentes que en el actual contexto económico vale la pena analizar bien en qué usarlos o cómo invertirlos para que rindan al máximo y no se diluyan en poco tiempo bajo los efectos de la inflación.
Lo primero es definir metas personales y familiares, para determinar si ese dinero se puede guardar por un tiempo, corto o no tanto; si hay que cancelar deudas o si conviene adelantar algún consumo que luego pueda sufrir un aumento de precio o variación en su cotización.
Lo óptimo sería tratar de invertirlo y aprovechar algunas oportunidades que presenta el mercado financiero por estos días preelectorales. Aunque no sea costumbre, y cueste deshacerse de algunos prejuicios, el “negocio” hoy está en hacer rendir los pesos y no en acumular dólares billete. Eso sí, hay que estar atentos y tener un buen timing para saber cuándo saltar de una moneda a la otra, porque esta “pax” cambiaria, claramente, no va a durar para siempre.
HASTA LAS PASO
“El tiempo que resta hasta las semanas previas a las PASO permanecerán vigentes fuertes incentivos para que los ahorristas e inversores más pasivos se tienten con productos simples, que brindan tasas de interés en pesos anuales del 23%, en plazos fijos a 30 días, o más cercanas al 24,5% anual, en fondos comunes de inversión de ahorro [money market], que tienen como ventaja extra que el dinero puede estar disponible en un plazo de 72 horas”, es la primera recomendación de Víctor Poma, head para el Segmento Online de Individuos en Puente.
A diferencia de lo que sucedía hasta el año pasado, ahora las tasas de interés en pesos ya no dan un rotundo resultado real negativo, al descontarle a la tasa nominal el impacto de la inflación. Los números van, por lo menos, más empatados.
Aprovechar que el dólar está “planchado” y sacar ventaja de las colocaciones en pesos es también la recomendación de Christian Reos, portfolio manager de Allaria Ledesma & Cía.: para quien tenga un excedente de pesos, las Lebacs -las letras de corto plazo que emite el Banco Central- son una buena alternativa. Estos títulos rinden 25% anual. “También son atractivos los bonos que recientemente emitió el gobierno nacional, los Bonac, cuyo rendimiento se ajusta por la tasa de las Lebacs”, agrega.
Los Bonac son títulos del Tesoro Nacional a corto plazo, con vencimiento en marzo y septiembre de 2016, y devengan un interés variable que se paga en forma trimestral en función del nivel de tasas de las letras del Banco Central de la República Argentina a 90 días.
Para Pedro Cristiá, gerente general de First Capital Markets, la mejor opción “para manejar cualquier excedente de liquidez en un horizonte de corto plazo [uno a tres meses] es focalizarse en instrumentos en pesos de corto plazo con baja volatilidad”. En este sentido, recomienda comprar: cheques de pago diferido (CPD) avalados por SGR y/o Lebacs de corto plazo que rinden un 25% en promedio y superan a los plazos fijos.
¿DÓLARES O PESOS?
El dólar es para los argentinos sinónimo de ahorro y de resguardo de valor. Es cierto. Pero en esta coyuntura tan particular, donde la moneda estadounidense se apreció apenas 5% en lo que va del año, después de haber subido más de 30% en 2014, encapricharse con acumular billetes verdes (ahora más azulados) no es la opción más redituable. Por lo menos si se trata de operaciones cortas, una especie de “parking” para dentro de unos meses, aplicar los fondos a otro objetivo, sea el pago de las vacaciones o una pequeña reforma en la casa.
“No veo como una buena opción comprar dólares, dado que el inversor pierde con el spread o diferencial cambiario entre el tipo de cambio comprador y el vendedor, que ronda entre un 3 o 4%. Es decir, comprar dólares para venderlos en el corto plazo implica asumir una pérdida de entrada del 4%”, aclara Cristiá.
Por el momento, “el dólar quieto transforma las rentabilidades simples en pesos en altas rentabilidades en dólares, volviéndolas muy atractivas”, explica Poma, de Puente. “Este veranito muy probablemente continúe hasta las PASO, y luego deberá reevaluarse la cartera de inversión y las alternativas que se presenten en el nuevo contexto.”
Si el horizonte es un poco más largo, en cambio, Mariano Sardans, CEO de la gerenciadora de patrimonios FDI, aconseja hacerse de dólares ahorro al límite máximo que permite la AFIP y “con los billetes en la mano hay buenas alternativas para invertirlos”, y aclara: “Tienen sus riesgos, pero son muy rendidoras”.
Su recomendación, entonces, es adquirir dólares a futuro, comprando bonos emitidos por el gobierno nacional. “Es la forma más barata y en pesos de comprar dólares que se recibirán en el futuro”, dice, y menciona cuatro “buenas opciones” para hacerlo. Los bonos son: Boden 2015 (RO15), Bonar 2017 (AA17), Bonar 2024 (AY24) y Discount 2033 (DICA).
Estos bonos tienen, en dólares, rendimientos inmejorables de entre 8,3% anual, en el caso del Bonar 17, y de más del 9% el resto de los títulos. Quien espere al vencimiento se habrá asegurado dólares a $ 10, en el caso de los que vencen en 2017; a $ 7,38, si el horizonte se estira a 2024, y a $ 5, con el Discount 2033, siempre según el cálculo Sardans.
“Estas tasas [TIRes] anuales no van a durar mucho más, ya que descontamos una baja importante del riesgo país -y, por ende, una suba en el precio de los bonos- con el próximo gobierno, cualquiera que sea el candidato que triunfe. Entonces, cuanto más largo se pueda invertir, más tiempo se logra asegurar estas tasas anuales o más barato se adquieren dólares «a futuro» con pesos”, explica.
A LARGO PLAZO
La tercera opción para tratar de maximizar el aguinaldo es animarse al mercado de las acciones. No es para cualquiera. La volatilidad (es decir, las fluctuaciones de precio) en tiempos preelectorales pueden crispar los nervios de quienes no estén habituados a este tipo de operatoria, pero, a largo plazo, pueden resultar muy buen negocio.
“Para quien no tenga necesidad del dinero en los próximos meses y esté dispuesto a tomar el riesgo que implica el mercado de renta variable, nos gustan: Banco Macro, Grupo Financiero Galicia, YPF, Siderar y Telecom”, recomienda Reos, de Allaria Ledesma.
En la misma línea, Cristiá dice: “Si el inversor tiene una perspectiva de largo plazo [más de dos años], incluiría en el portafolio acciones”, y avanza: “En este sentido, el sector bancario es uno de los que más vio caer sus valuaciones en relación con períodos anteriores”.
En el menú para los más arriesgados, Puente incluye acciones de YPF, Pampa Energía, Petrolera Pampa y los bancos Macro y Galicia.
Claro que la opción de ahorrar o invertir el aguinaldo no es una posibilidad que le calce a todo el mundo. Si las finanzas personales no están lo suficientemente ordenadas, si hay deudas con la tarjeta de crédito, por ejemplo, el mejor destino que se le podrá dar al salario complementario es, justamente, achicar los rojos: las tasas de interés por no pagar el total del resumen de la tarjeta de crédito superan el 40% o 45% anual, más los gastos de seguros, y terminan convirtiéndose en una bola de nieve que hunde cualquier presupuesto. Lo mismo sucede cuando se adeudan impuestos municipales, cuotas de patentes o expensas.
“Lo prioritario será conseguir tranquilidad para el día tras día y lograr la mejor base para avanzar con los objetivos de vida”, destaca Poma, quien concluye: “Saldar cuentas, dejar de refinanciar en todo o parte la tarjeta de crédito para recuperar límite en los próximos meses, de manera que no se vuelva una pesadilla tener que esperar a que lo rescate… el próximo aguinaldo”.
MENÚ DE ALTERNATIVAS
• Corto plazo: para los más conservadores, hay opciones para lapsos de tres a seis meses: plazos fijos, con un rendimiento anual en pesos de 23 a 26% -según el banco-; FCI de dinero, con 24% en promedio; y Lebacs, 26% nominal
• Mediano y largo plazo: la alternativa son los bonos. Los recomendados por los especialistas son Boden 2015 (RO15), Bonar 2017 (AA17), Bonar 2024 (AY24) y Discount 2033 (DICA)
• Estos bonos tienen, en dólares, rendimientos inmejorables de entre 8,3% anual, en el caso del Bonar 17, y de más del 9%, el resto de los títulos
• Quien espere al vencimiento se habrá asegurado dólares a $ 10, en el caso de los que vencen en 2017; a $ 7,38, a 2024, y a $ 5, con el Discount 2033
• Pagar deudas: achicar los rojos es un buen negocio, ya que, por ejemplo, las tasas de interés por no pagar el total del resumen de la tarjeta de crédito superan el 45% anual