03 jun 2016.- El oficialismo avanzó ayer con la remoción de Ricardo Echegaray de la presidencia de la Auditoría General de la Nación (AGN), luego de que el juez federal Claudio Bonadio lo procesó por los delitos de falso testimonio y violación de secreto durante su gestión al frente de la AFIP.
“El procesamiento nos da la herramienta legal que necesitábamos para poder sacarlo de la Auditoría”, dijo la vicepresidenta Gabriela Michetti, después de conocida la resolución judicial contra Echegaray. Según Bonadio, el ex jefe de la AFIP incurrió en esos delitos al denunciar en 2014 a Alfonso Prat-Gay como parte de una maniobra de lavado de dinero por medio de la cuenta que tenía Amalia de Fortabat en el HSBC de Suiza.
“No vamos a perder ni un minuto para redactar la resolución que le quita esa responsabilidad, que debe ser ejercida por alguien que reúna otras condiciones éticas”, agregó la vicepresidenta sobre el titular de la AGN. Echegaray anticipó que resistirá la medida, que calificó de “irregular, ilegal, nula e ilegítima”.El PJ, que impulsó la designación del funcionario, también cuestionó el procedimiento, por lo que la decisión podría derivar en un enfrentamiento político.
La remoción se concretó anoche por medio de una resolución conjunta de Michetti, presidenta del Senado, y del presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó. Los funcionarios demoraron ayer algunas horas la firma del documento a la espera de la notificación formal del juzgado de Bonadio y finalmente avanzaron en el trámite cerca de las 22.
La decisión se produjo también luego de que anteayer quedaron expuestas una vez más las diferencias que había generado en el oficialismo la designación de Echegaray. Elisa Carrió cuestionó duramente a Michetti por haber firmado la designación, el 5 de enero. “Yo jamás hubiera entregado mi conciencia para ser vicepresidenta y hubiera puesto mi renuncia antes de designar a un delincuente como Echegaray”, dijo Carrió.
Sin nombrarla, ayer Michetti pareció responderle al defender su decisión. “Hubiéramos estado incumpliendo la ley si no lo designábamos, porque la responsabilidad de nombrarlo al frente de la Auditoría es del partido de la oposición. Ahora podemos negarle este cargo en esta institución tan importante de la República”, afirmó.
Objeción peronista
Brazo técnico del Congreso, la AGN es el máximo órgano de control de Estado y, por mandato constitucional, su presidencia le corresponde a la principal fuerza de la oposición, hoy el PJ. El partido cuestionó ayer la destitución. “Para resolver, las presidencias de las cámaras legislativas requieren que el auto de procesamiento esté firme. Es imprescindible una ratificación judicial de cámara”, dice un comunicado del consejo nacional del PJ, presidido por José Luis Gioja. De sólo dos párrafos, el texto no hace una defensa de la figura de Echegaray. En caso de destitución, el PJ será el encargado de nombrar al reemplazante.
La legislación deja espacio para diversas interpretaciones, por lo que la cuestión seguramente terminará en la Justicia. Michetti y Monzó van a fundar la decisión en el artículo 124 de la ley de administración financiera, que rige el funcionamiento de la AGN, que indica que “en caso de inconducta grave o manifiesto incumplimiento de sus deberes los auditores podrán ser removidos por los procedimientos establecidos para su designación”.
Fuente: /lanacion.com.ar