10 DIC 2014 La “especulación hormiga” fue uno de los negocios más pujantes del año, por obra y gracia de la brecha cambiaria: hubo momentos en los que quienes compraban dólares ahorro y luego los revendían en el mercado paralelo podían hacerse de unaganancia inmediata superior al 60%, algo muy difícil de empardar en cualquier mercado del mundo.
Claro que no es gratis: el Estado es quien “subsidia” los beneficios de quienes hacen estasoperaciones de arbitraje, por su política restrictiva en la venta de divisas.
Pero la dupla Kicillof-Vanoli está dispuesta a que su cruzada contra el dólar blue termine, o al menos atenúe, este costo.
De momento, los números a ambos le están sonriendo: en los primeros días de diciembre se está verificando una caída de un 30% en la cantidad de dólares demandados por los particulares, si se lo compara con dos meses atrás, cuando la especulación estaba en su nivel máximo.
Vanoli considera esta situación como uno de sus grandes logros al frente del Banco Central: asocia este menor volumen en la compra de dólares con la disminución de la brecha cambiaria -lo cual le resta atractivo al operativo de reventa- y a la suba en las tasas de los plazos fijos -lo que hace más atractivo el ahorro en pesos-.
“Los pequeños ahorristas ganaron sólo en noviembre 300 millones de pesos por apostar a la moneda nacional”, afirmó el titular del Central al comparecer en el Senado, que debía formalizar la aprobación a su nombramiento en el cargo.
Al mismo tiempo, argumentó que en lo que va de su gestión “los especuladores perdieron”, dado que se consiguió que el dólar blue tuviera un retroceso del 17,5%, mientras que el “conta con liqui” cayó un 16 por ciento.
¿Prueba superada con el billete informal? Para los analistas, la dupla tiene sobradas razones para festejar, si bien advierten que no debería cantar victoria antes de tiempo. Señalan queaún falta pasar el verano que, históricamente, es un momento complicado para un país cuya estacionalidad de ingreso de divisas coincide con el otoño.
Y, si bien es cierto que el volumen operado en el mercado cambiario ha disminuido, eso no implica que haya desaparecido el espíritu especulador. Por el contrario, los analistas están prestándole atención en estos días al mercado de futuros, que marca una expectativa de devaluación del 42% en un año.
En tanto, el “dólar de convertibilidad” -como se le llama en la jerga financiera a la cantidad de pesos que circulan por cada dólar guardado como reservas- da una relación de más de $15.Esta referencia es, precisamente, la que lleva a muchos analistas a afirmar que aún sigue siendo una buena apuesta comprar dólares en cualquiera de sus variantes.
El alto costo de la estabilidad
Hasta noviembre, el Banco Central llevaba vendidos bajo la forma de “operaciones por tenencia de moneda extranjera” unos 2.500 millones de dólares, que salieron directamente de su stock de reservas.
Para hacerse de este monto el público se desprendió de unos 21.000 millones de pesos, a los que se deben sumar otros $4.200 millones en concepto de anticipo al impuesto a lasGanancias, equivalentes al 20% del monto autorizado por la AFIP.
Lo más relevante es el “subsidio encubierto” que fueron recibiendo estos miles de compradores para adquirir divisas más baratas que la cotización blue, diferencia que hasta noviembre representó la friolera de $8.000 millones.
/ iprofesional.com