29 DIC 2014 La Argentina completó el crecimiento económico más sostenido, más importante y más prolongado de nuestros 200 años de historia“, repite cada vez que puede y ante cada atril del que dispone la presidenta Cristina Kirchner.
Sin embargo, esto sólo se sostiene por una manipulación estadística. El crecimiento a tasas chinas como un diferencial del modelo es sólo parte del relato.
Al contrario de lo que afirma el discurso oficial, el kirchnerismo no logró la mayor expansión económica de la historia argentina.
Esta es la principal conclusión de una investigación del proyecto Arklems -impulsado por especialistas de la UBA en colaboración con la Universidad de Harvard-, que analizó el producto bruto interno (PBI) de la Argentina durante los últimos 100 años (1913-2013).
“El régimen macroeconómico actual, si bien se destaca por la recuperación acelerada del nivel de producción poscrisis, no es el único que presentó tasas chinas en el último siglo”, afirma el documento de Arklems.
“Por tasa acumulada y promedio anual, los períodos de mayor recuperación poscrisis fueron 1900-1913, 1913-1929, 1963-1974 y 2002-2014 (medido por el Indec)”, completa.
“Se detectan aceleraciones a tasas chinas en diversos períodos de la historia argentina con diversos signos políticos y modelos macroeconómicos”, señaló el experto Ariel Coremberg.
“Al término de la Primera Guerra Mundial, con los gobiernos radicales de Yrigoyen–Alvear en 1917-1924 (72%); en los primeros años de Frondizi, en 1959-1961 (15,6%); con Illia, en 1963-1965 (20,2%); con Carlos Menem, en 1990-1994 (33%) y con Néstor Kirchner 2002-2007 (46%)”, enumera el paper.
Coremberg aclaró al diario La Nación que este último período de crecimiento llegó tras la “mayor depresión económica de la historia argentina“, que incluso superó la crisis de 1930.
Los promedios anuales de esos períodos muestran que, por ejemplo, con Illia se alcanzaron tasas de crecimiento anuales de 9,6% o que en el período radical de principios de siglo XX (de Yrigoyen-Alvear) reflejó una expansión promedio anual de 8,1 por ciento. Ambos porcentajes superan los que registró Néstor Kirchner durante su mandato (7,9 por ciento).
“Se podría decir que el kirchnerismo tuvo seis años chinos y seis argentinos“, afirmó Lucas Llach, investigador de la Universidad Di Tella (UTDT).
Llach recordó, por ejemplo, que en 1901-1913, el país tuvo un crecimiento de 107% o que eldesarrollismo mostró un acumulado entre 1959-1971 de un 71 por ciento. Ambas medidas superan lo estimado por Coremberg para el período 2002-2014, que es de un 64 por ciento (o sea, un 4,2% promedio por año).
Coremberg se detiene en una aclaración sobre el período 2002-2014 y el impacto de la manipulación estadística que comenzó en 2007. Según el trabajo de investigación, el periodo 2002-2014 acumula un crecimiento del 64% en la serie Arklems encadenada y un 76% en la réplica de la serie base 1993 sin manipulación.
Por otro lado, la serie del Indec oficial base 2004 acumula un crecimiento de 92% para ese período, mientras que el base 1993 (Indec), suma 108 por ciento.
“Ello demuestra que las diferencias existentes se deben mayormente a la manipulación discrecional de las series oficiales a partir de la intervención en el Indec y en mucha menor medida al año base considerado”, aclararon los investigadores de Arklems, según consigna el diario La Nación.
Otra de las conclusiones a las que llega el estudio de Coremberg es que la Argentina fue el país que menos creció a largo plazo de América latina, por debajo incluso de Venezuela. Esto siempre medido por el PBI elaborado por los especialistas de la UBA. Incluso tomando el dato oficial para el mismo período, la Argentina aparece quinta, por debajo de Perú, Ecuador, Chile y Bolivia.
/fuente: iprofesional.com.ar