14 ENE 2015 A pesar que recibieron aportes del Tesoro por igual monto, en los distritos volvieron a gastar por encima de sus ingresos por cuarto año consecutivo, según advirtió el Cippec.
Las provincias cerraron el 2014 con un déficit de $ 9.000 millones y así sumaron el cuarto año de resultado fiscal negativo, según estimaciones del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec).
Sin embargo, aún sin cifras oficiales definitivas, otras proyecciones como la de la consultora Economía & Regiones marcan que el rojo fiscal fue aún mayor y alcanzó los
$ 12.900 millones.
Para el Cippec, la magnitud del desequilibrio fiscal provincial siguió reduciéndose en 2014 y pasó de -5,1% de los ingresos totales en 2011 a alrededor de -1,2% en 2014. Sin embargo, advirtieron que la mejora “se apoya en tres pilares de dudosa persistencia” en 2015: la acreditación de Aportes del Tesoro Nacional (ATN) por más de $ 9.000 millones, un fuerte ajuste de las cuentas provinciales y un significativo aumento de la presión tributaria.
“Es difícil que se repitan en un año electoral y un contexto de caída del nivel de actividad y el empleo”, advirtieron los investigadores del centro Lucio Castro y Walter Agosto.
Desde el centro de estudios destacaron que dentro del panorama general, aparecen importantes diferencias entre los distritos. Así, sobre la base de los datos disponibles a septiembre de 2014, hay provincias que exhibieron una situación fiscal aún más holgada que en 2013, como Buenos Aires o la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y jurisdicciones que experimentaron un importante deterioro, como Santa Fe, o con cuadros fiscales más frágiles, como Mendoza.
Según el informe, la prórroga del período de gracia de vencimientos de intereses y amortizaciones de la deuda de las provincias con la Nación en 2014 fue clave para los 17 distritos que integran el Programa Federal de Desendeudamiento.
Así según las estimaciones del Cippec los recursos tributarios provinciales habrían crecido 36% en 2014 en relación con 2013, impulsados por una suba del 50% de las transferencias corrientes provenientes de la distribución de $ 9.800 millones de ATN. Por el lado de las erogaciones, el gasto total habría experimentado un incremento de 35,2%, resultado de un incremento del 35,5% en los gastos corrientes y 33% en los gastos de capital.
“El 2015 comienza con desafíos no triviales para las finanzas provinciales. Por un lado, seis de las principales provincias afrontarán este año amortizaciones de deuda cercanas a los $ 35.000 millones, de los cuales más del 70% están denominadas en moneda extranjera o atadas a la cotización del tipo de cambio, lo que expone a las cuentas públicas provinciales a las fluctuaciones cambiarias”, advirtieron Castro y Agosto. Tanto Santa Fe como la provincia y la Ciudad de Buenos Aires son las que tienen la deuda más dolarizada o vinculada con las fluctuaciones cambiarias, según el estudio.
“Más del 98% del stock de deuda de Santa Fe está denominado en moneda extranjera, cifra que alcanza el 58% en la provincia de Buenos Aires y casi el 50% de la deuda de la Ciudad de Buenos Aires”, precisaron.
Fuente: El Cronista