13-MAR-2014 Los ejecutivos de la industria automotriz se habían ilusionado hace algunos días con que el Gobierno pudiera anunciar cambios en el impuesto que se aplicó a comienzos de año sobre los autos de alta gama. Pero ayer, tras una reunión que duró más de dos horas en el Ministerio de Economía, se fueron con las manos vacías.
Pese a que hace menos de una semana hasta el jefe de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, había admitido públicamente que el equipo económico estaba revisando el impacto que había tenido el ajuste en los impuestos internos sobre la industria, Economía habría decidido en este primer encuentro no mostrar sus cartas.
Durante la reunión, de la que participaron los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Industria, Débora Giorgi, además del secretario de Comercio, Augusto Costa, y los diputados nacionales Roberto Feletti, Oscar Romero y Carlos Gdansky, se optó, en cambio, por pedirles explicaciones a los ejecutivos del sector por los aumentos de precios que hubo desde diciembre en los distintos modelos de autos, y, sobre todo, en aquellos que no están alcanzados por el impuesto.
Los empresarios se comprometieron a volver a reunirse la semana próxima para presentar las listas de precios que hoy se están aplicando, ya que, afirmaron en Economía, pese a que la devaluación los afectó en un 14%, hubo subas de hasta 30%.
También las empresas pidieron a Kicillof que les garantice cierta previsibilidad de la economía hacia adelante, sobre todo, en lo que hace al dólar y a la inflación. A lo cual el ministro respondió que ya llevaba más de un mes con un dólar estable en torno a los $ 8, y una convergencia cada vez mayor entre los distintos tipos de cambio, por lo que no había nada que hiciera prever un “descalabro” que generara “otra situación con el dólar”.
Les exigió, en contrapartida, que el sector garantice a sus clientes previsibilidad, con un normal abastecimiento de las unidades, y precios estables, ya que recordó que hubo momentos en los que quienes deseaban comprar un auto se encontraban con que no había precio.
“Sólo tangencialmente se trató el tema del impuesto a los autos de lujo. Pero claramente forma parte de la agenda, si no, no tenía sentido que participaran de la reunión legisladores”, interpretó una fuente del sector. “Fue un encuentro positivo. Kicillof garantizó las variables económicas, que no va a haber cambios bruscos, que se va a permitir las operatorias de las terminales y sí empezar a acelerar medidas para incentivar el tema exportaciones”, dijo otra fuente que participó de la reunión.
La realidad es que, un día antes, fuentes oficiales habían dejado trascender que se estaba trabajando en una propuesta desde Economía para subir el mínimo a partir del cual rige el impuesto en $ 30.000, por lo que quedarían alcanzados los autos de 200.000 pesos en adelante y no de 170.000, como sucede ahora.
“No era una propuesta, era un principio de una idea”, se escudaron ayer en el Ministerio. “La verdad es que el impuesto sólo afecta al 4 por ciento de las ventas de autos de fabricación local, incluso las automotrices reconocieron en la reunión que en realidad el problema no era ése”, argumentaron.
Las terminales estuvieron representadas por el director ejecutivo de Adefa, Fernando Rodríguez Canedo, y su par de Acara (concesionarios), Abel Bomrad, junto con ejecutivos de las fábricas radicadas en el país.
/fuente: lanacion.com.ar