10 agos 2016.- El plan de Aerolíneas Argentinas está basado en llegar al déficit cero en cuatro años. En ese camino, la CEO de la compañía, Isela Costantini, es optimista con los datos que maneja en el primer semestre de su gestión. Este año, cerrará con pérdidas por u$s 266 millones, cuando en 2015 habían llegado a u$s 520 millones.
La reducción es consecuencia de un recorte de 30% de todos los costos no operativos de la organización, la revisión de contratos y compras en curso (por ejemplo se desarticuló el acuerdo con SOL que significaba $ 1 millón por día de pérdidas), entre otros ajustes como el fin de las rutas a Brasilia; Córdoba-Miami; La Habana y Belo Horizonte.
Según explicó la ejecutiva, entre enero y junio, el área comercial generó un ahorro de u$s 73,9 millones. También fue fundamental el acuerdo de financiamiento de siete aeronaves por u$s 280 millones con la empresa GE Capital Aviation Services Limited (Gecas) a una tasa de 6,23%, que supone un ahorro de u$s 20 millones respecto de las tasas pagadas en el pasado.
Pero además, dijo, se buscaron oportunidades en donde generar más ingresos. Así se logró llegar a un récord de pasajeros en julio dentro del país. Fueron más de un millón, equivalente a un crecimiento del 13% en cabotaje. Acompañada por el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, la CEO de Aerolíneas explicó que julio fue justamente un mes de inflexión en la empresa que terminó dejando récords. “Veníamos forzando la máquina, incrementando frecuencias, tramos, pasajeros. Todo para ver cómo entregábamos los resultados del primer semestre”, dijo.
Satisfecha, muestra que la medición de puntualidad alcanzó el 82% (un 30% más que el año anterior), los pasajeros demorados cayeron 67% y el cumplimiento (vuelos sin cancelaciones) llegó al 97,2%.
Costantini detalló además que “en menos de un mes, la ruta Ushuaia -Córdoba – Salta (que no pasa por Buenos Aires) transportó 177.000 pasajeros con niveles de ocupación superiores al 70%. Y recordó que a partir de septiembre se hará énfasis en Córdoba con tres nuevas rutas a Puerto Seguro, Resistencia y Río Cuarto.
Sobre los vuelos internacionales que se abandonaron, como hacia Brasilia que solo tenía una ocupación de 50%, Costantini explicó que los aviones que se utilizaban se destinan ahora a rutas que tienen mayor demanda y que en estos momentos generan rentabilidad. Mencionó el caso de Nueva York, que volaba a pérdida y pasó a dar ganancias.
Aún así, admitió que quedan rutas en revisión cuyo resultado intentarán revertir. Es el caso de la de Barcelona, que asegura ya comenzó a mejorar, mientras que la de Roma todavía genera pérdidas. Además, se estudian dos rutas de cabotaje que están en rojo.
“Tenemos la convicción de que no podemos lanzar una ruta que no sea déficit cero, el desafío en todo caso será que ganemos plata. Hoy los subsidios no son para las rutas sino para mantener la estructura de la empresa”, sentenció.
Fuente: /cronista.com.ar