Origen de su conmemoración
El jueves 01 de mayo de 2014, se conmemora un nuevo “Día Internacional del Trabajador”, fecha que fue instaurada en reconocimiento y memoria de aquel 1º de Mayo de 1886, cuando un grupo de obreros estadounidenses se movilizó en reclamo de reivindicaciones laborales.
En ese momento de la historia –albores de la Revolución Industrial- estos obreros llevaban a cabo una protesta con un claro pedido: reducción de la jornada laboral a 8 horas, cuando lo “normal” era trabajar entre 12 y 16 horas. La fuerza demostrada inicialmente por 80.000 trabajadores, desembocó en una poderosa huelga nacional aquel 1º de Mayo que afectó a numerosas fábricas de los Estados Unidos, debido a la falta de cumplimiento de la Ley Ingersoll promulgada por el entonces presidente de Estados Unidos, Andrew Johnson.
El episodio más famoso de esta lucha y que dio transcendencia al calificativo “Mártires de Chicago”, fue el funesto incidente de mayo de 1886 en la Haymarket Square de Chicago: durante una manifestación contra la brutal represión de una reciente huelga que había causado muertes y heridos, en medio del caos estalló una bomba supuestamente arrojada contra las fuerzas represoras, suceso conocido como “el atentado de Haymarket”. Aunque nunca se pudo descubrir quién fue el responsable de este atentado, cuatro líderes anarquistas fueron acusados, juzgados sumariamente y ejecutados.
La repercusión mundial de estos hechos provocó una oleada de indignación que obró como factor aglutinante de fuerzas dispersas que combatían por los mismos ideales que aquellos trabajadores estadounidenses. Treinta y tres años después, en 1919, la primera conferencia de la OIT – Organización Internacional del Trabajo-, que acababa de ser constituida, proponía la adopción universal de la jornada de ocho horas y la semana de 48 horas.
La consecución de la jornada de 8 horas marcó un punto de inflexión en el movimiento obrero mundial.
En la actualidad, casi todos los países democráticos lo festejan y cada año proporciona a los trabajadores una oportunidad para afirmar sus derechos y su mutua solidaridad.