20 ENE 2016.- El Banco Central moderó ayer el descenso en las tasas. En su licitación de letras semanal, mantuvo sin cambio las tasas de corto plazo (35 días), que quedaron en torno al en 31%, mientras que a mediano y largo plazo bajaron entre 25 y 50 puntos básicos.
El objetivo de Federico Sturzenegger es encontrar el equilibrio para que las tasas se mantengan siempre por encima de la inflación, y fomentar el ahorro en pesos pero sin que esto encarezca desmedidamente el crédito. El presidente del BCRA quiere evitar incurrir en el error del kirchnerismo, que mantuvo tasas reales negativas.
La tasa de mayor plazo, que es de 252 días, quedó en el 28,48% y de esta forma se ubica 3 puntos por encima de la última licitación previa al cepo. Ayer el BCRA morigeró también la aspiradora de pesos: consiguió una contracción de $ 2.548 millones, cuando en la última licitación logró absorber $ 20.496 millones. Algunos creen que la baja en la absorción de ayer se debe a la licitación de Boden 2020 que se hará hoy. El BCRA aspiró cerca de $ 88.500 millones desde el fin del cepo.
Luego del levantamiento del cepo, el equipo que comanda Sturzenegger aun debe resolver un desafío crucial: desdolarizar la cabeza de los ahorristas ofreciendo atractivos plazos fijos por encima de la tasa de devaluación. Pero será clave en dicha tarea determinar el grado de asistencia del Central al Tesoro y fijar un lineamiento de emisión.
En el mercado, creen que las tasas ya encontraron su piso. Basan su argumento no sólo en las proyecciones de inflación sino también en las últimas licitaciones del BCRA, en las que las tasas para los plazos más cortos bajaron de 38% a 36%, luego a 33% a 32% y en las últimas dos licitaciones, a 31%. /clarín.com.ar
26Nov