31 OCT 2014 En un discurso más político que económico el ministro de Economía, Axel Kicillof, hizo una encendida defensa del proceso de industrialización que se llevó a cabo durante estos 12 años.”No vamos a entregar la industria. Seguiremos por el camino de la reindustrialización”, enfatizó el funcionario al dirigirse a industriales metalúrgicos.
Como profesor de historia económica que fue, comenzó haciendo una reseña histórica al indicar: “La industrialización fue una etapa que se inicia con una de las peores dictaduras de la historia de la humanidad. En esa dictadura Martínez de Hoz tiene un discurso industrializador, miren qué paradoja. Pero todos sabemos cómo fue la historia. Ellos pensaban que se podía industrializar la Argentina sin sindicatos, con la muerte y desaparición de los luchadores sindicales. Pero esto fue un proyecto volcado a los servicios. Pronto vino la propaganda con la silla industria nacional que se rompía, etc.”.
Kicillof recordó que la historia económica argentina se caracterizó por ciclos: modelo agroexportador, luego industrialización para luego culminar en un ciclo de “apertura, neoliberal, caracterizado por el ajuste”.
Sí se permitió recordar que fue alumno de Aldo Ferrer, el economista que escribió -entre otros libros-“Vivir con lo nuestro” y mientras hacía referencia a los procesos que vivió el país manifestó el deseo de que su explicación no sería merecedora de que el profesor “lo boche” a lo cual Ferrer se sonrió.
A juicio de Kicillof “esta desindustrialización del país duró hasta 2001 con la crisis. Y luego comenzó un proceso que yo llamo la cuarta etapa de industrialización de la Argentina”. En este punto comentó que Antonio Calo “cuenta siempre que su gremio tenía 60 mil afiliados y ahora tiene 300.000 mil”.
Si bien no hizo ninguna referencia a temas coyunturales (como la inflación, tipo de cambio, crecimiento o la caída de los títulos públicos que se registró en la jornada), sí admitió genéricamente: “Hay dificultades, por supuesto. Hay desafíos, decisiones duras que hay tomar, por supuesto que hay tensiones, si uno quiere un proceso de transformación en el país. Argentina era el primer país industrial de Latinoamérica. Y ahora comenzó a recuperar ese lugar que había perdido”.
Haciendo referencia de que existen sectores que conspiran contra este tipo de modelos indicó: “Ya vimos cómo actúa el mercado sin un Estado presente. El camino de la industrialización necesita de la unidad de todos los argentinos”. También calificó la caída de los mercados que se registró una vez conocido el triunfo de Dilma Rouseff en Brasil como los sectores que conspiran con un modelo parecido al de Argentina.
El ministro hizo eje, ante un auditorio proclive a escuchar estos conceptos, que “hay que generar empleo y fortalecer el mercado interno. Generar una demanda interna. Es la única forma que tenemos nosotros los países periféricos, la única vía para darle sostenibilidad al crecimiento de la Argentina, la reindustrialización del país es la única vía”, se exaltó.
Quizás preparándose para un rol más activo en la campaña política del 2015, Kicillof en más de una oportunidad indicó que existen propuesta que buscan lo contrario al modelo industrial que impulsa el kirchnerismo.
“Me podrán convencer de cualquier cosa. Yo no vengo a defender que se hizo todo bien, que está todo bien, pero yo estoy orgulloso de decir que se puso por delante un programa político económico de crecimiento con inclusión social. Porque si la política dice otra cosa, la economía termina siendo descarriada, como terminó en la crisis del 2001”, enfatizó el funcionario.
“Este es el debate que se tiene que dar de cara a las elecciones del 2015. ¿Se va a seguir con un proyecto de industrialización? ¿Se va a poner énfasis en el mercado interno o se van a desarrollar programas de endeudamiento, de modernización del Estado, de apertura del mercado? Políticas que ya las conocemos muy bien”, instó mostrando que el eje del mensaje del oficialismo será instalar el temor de que la oposición destruirá todo lo logrado en esta década.
Por esta causa insistió: “Eso es lo que se tiene que discutir, que es lo que se quiere para el 2015 en adelante. Porque esas políticas nos dejaron en la ruina y en la miseria”.
Previamente enfatizó los problemas que enfrenta el mundo: “La crisis del 30 en seis años no había tenido ninguna solución. Estamos ante la misma situación, la crisis del 2008 todavía sigue igual, sin solución.” Aunque aseveró que en Argentina “tenemos nuestras herramientas para encarar esta crisis porque hemos fortalecido nuestro mercado interno”.
También se ocupó de denostar la dicotomía agro vs. industria al señalar: “Que no les mientan, no hay que optar entre una cosa y la otra. Se puede crecer a nivel industrial y también en el agro, es mentira que hay que optar entre uno u otro. Néstor Kirchner aplicó las políticas necesarias como para hacerlo”.
A lo largo de toda su alocución se ocupó de enfatizar que “la inclusión social es el instrumento más potente que tiene nuestro país para seguir creciendo”, concluyó.
/fuente: ámbito.com