03 SEP 2014 Más presión sobre el campo Los chacareros deberán informar donde los guardan. Estiman que hay 27 millones de toneladas sin liquidar.
Para alimentar los temores que despierta en el sector agropecuario la Ley de Abastecimiento que el kirchnerismo impulsa en el Congreso, la AFIP comenzó a exigirles a los productores que declaren con precisión meridiana el lugar dónde guardan su soja. Tanto que, además de declarar el stock que conservan en el campo, los chacareros ahora deberán brindarle también a Ricardo Echegaray la “ubicación georreferenciada”. Esto es, los datos necesarios para hallar cada silo-bolsa con un simple GPS.
Los chacareros comenzaron a enterrarse de la nueva exigencia de la AFIP por estos días, ya que se acerca el vencimiento del plazo establecido para declarar ante el organismo tributario las existencias de granos que siguen almacenados en depósitos propios o ajenos. La mayoría de la soja y el maíz que no ingresó todavía al circuito comercial, se sabe, está en los campos, dentro de las enormes salchichas de plástico blanco.
Se estima que unas 27 millones de toneladas de soja, la mitad de la cosecha, todavía permanece en poder de quienes la produjeron.
Tradicionalmente la AFIP ponía plazo hasta el 31 de agosto para declarar estas existencias, pero esta vez lo extendió hasta el 30 de setiembre, pues añadió ciertos requisitos. Así, explicó a los contadores que desde “la campaña 2014/2015, se rediseña el Anexo Información existencia de granos”, para incorporar algunas “mejoras”. Estas son: será obligatorio informar sobre “la ubicación georreferenciada de los granos en depósitos propios y/o de terceros”, pero además habrá que detallar “la adquisición de silo bolsas para uso propio”.
Según estimaciones de técnicos del INTA, en la Argentina se utilizan unas 200.000 de esas gigantes bolsas de 60 metros de largo, y cada una de ellas puede albergar unas 200 toneladas de soja. Es decir que el sector está en condiciones de mantener en el campo hasta unas 40 millones de toneladas de granos.
La AFIP ahora quiere saber los datos exactos.
El sector rural, esta vez junto a otras representaciones empresarias, rechazó en duros términos la posible aplicación de la nueva Ley de Abastecimiento, ante el temor de que el gobierno -necesitado de dólares- la utilice para forzar a los productores a vender su soja. Ayer mismo, el titular de la Rural, Luis Miguel Etchevehere, redobló las críticas: “El campo no necesita que se aplique (esa ley) para saber que no va a funcionar porque el Gobierno viene aplicando de hecho ese tipo de medidas con resultados muy malos“, aseguró.
/fuente: clarin.com