26 ENE 2015 Ante la incertidumbre que genera la evolución de la inflación en los próximos meses, la mayoría de los gremios que debían renegociar sus paritarias durante enero optaron por avanzar con acuerdos de pagos de adelantos o “sumas puente” a cambio de patear hasta marzo la discusión del aumento salarial anual. En ese estrategia picaron en punta los gremios de bancarios y choferes de colectivos de la UTA, que en la última semana pactaron con las respectivas cámaras empresarias el pago de anticipos para el primer trimestre del año, que constituirán la base sobre la que negociarán desde mediados de marzo el incremento para todo 2015.
En el caso de los bancarios el entendimiento se selló el último viernes entre referentes del gremio, que lidera Sergio Palazzo, y representantes de las cámaras de ABA, Adeba, ABE y Abappra. El acuerdo fijó un pago remunerativo mensual de $ 2.200 que los bancos abonarán a su personal en enero, febrero y marzo, además de un suplemento extraordinario (también remunerativo) de $ 3.000 que se pagará en febrero. Si se considera que el piso salarial de la actividad se ubica en torno a los $ 11.500, los adelantos acordados representan un incremento salarial cercano al 30%.
Similar esquema definió la UTA, que el miércoles firmó en el Ministerio de Trabajo un pago a cuenta no remunerativo de $ 5.000 que beneficiará a los choferes de corta, media y larga distancia. Según el entendimiento, esa suma se abonará en tres cuotas: $ 2.000 en enero, $ 1.500 en febrero y $ 1.500 en marzo, tras lo cual negociarán la suba para todo 2015.
Solo el gremio de Utedyc, que nuclea a trabajadores de entidades deportivas y clubes, definió su paritaria para todo el año al acordar un incremento escalonado de 30% (15% en enero, 10% en abril y el 5% en julio).
En cambio, la estrategia de bancarios y colectiveros supone un esfuerzo por postergar la negociación anual a la espera de obtener mayores certezas sobre la marcha de los precios. La intención es evitar repetir el escenario de 2014, cuando por efecto de la inflación los salarios reales acumularon una pérdida mínima de 5 puntos, que se duplicó en el caso de los sueldos alcanzados por el impuesto a las Ganancias.
A la par, algunos gremios como la propia UOM, de Antonio Caló, acordaron entre diciembre y las primeras semanas de enero el pago de suplementos para compensar ese deterioro. En el caso de los metalúrgicos, se fijó una suma no remunerativa de $ 2.000 mensuales que se abonará en febrero y marzo./ cronista.com.ar
