01 JUL 2015 El Indec amplió el informe de la balanza de pagos de la Argentina con el resto del mundo y dio cuenta de que la tenencia de activos externos del conjunto de residentes ascendió a fines de marzo último a u$s231.696 millones, equivalente a u$s5.420 por habitante.
Esos valores acusaron sendos aumentos de u$s8.551 millones y u$s152, respectivamente, en comparación con el nivel que informó el organismo oficial de estadística un año antes. En ese período, las ventas de dólar ahorro al cambio oficial, más un pago a cuenta de impuestos del 20%, totalizaron u$s5.374 millones, de los cuales se estima que quedaron inmovilizados en el sistema financiero poco más de 500 millones de dólares.
De ahí surge que unos u$s4.700 millones del incremento de las tenencias de divisas del conjunto de residentes, personas físicas y empresas, se nutrió de otras fuentes, como la economía informal, o la formal que optó por derivar parte de sus excedentes al atesoramiento en moneda extranjera, por considerar que es un buen activo de valor.
Según la serie oficial, desde diciembre de 2003 los activos externos de los residentes se elevó en poco más de u$s109.000 millones, con un promedio de u$s9.100 millones por año, el cual es apenas superior en un 5% a la fuga de capitales verificada en los pasados doce meses, tornandoinocua la eficacia del control de cambios para la acumulación de moneda extranjera, aunque sucosto en términos de destrucción de riqueza y de empleos fue inocultable.
De los u$s231.696 millones que estimó el Indec de activos externos al cabo del primer trimestre de 2015, sólo desagrega -como ocurre desde la salida de la convertibilidad en 2002- la partida en manos del sector financiero, que ascendió en el último año apenas u$s315 millones, a u$s3.173 millones y la inversión directa en el exterior por u$s35.308 millones, que se elevó en 703 millones en los pasados doce meses.
Del saldo de u$s193.215 millones sin detalle, se sabe por la estadística del Banco Central que u$s9.650 millones estaban depositados en el sistema bancario y que crecieron en el período en 1.299 millones de dólares.
Queda un excedente que se estima que se puede dividir en unos u$s10.000 millones que corresponden a “activos con devengamiento de renta” por otros u$s10.000 millones y el remanente de u$s173.000 millones a “activos sin devengamiento de renta”, esto es tenencias de moneda extranjera guardados en cajas de seguridad personal y bancaria y en billetes en circulación en manos de personas físicas y jurídicas.
El último dato oficializado por el Indec de los activos sin devengamiento a renta, con fuente en la Dirección Nacional de Estadísticas Internacionales y Banco Central de la República Argentina corresponde a diciembre 2001, con u$s31.784 millones. De ahí surge que mientras en poco más de 14 años la fuga de capitales netas se multiplicó en 2,12 veces, la tenencia de divisas de modo poco productivo en poder de los agentes económicos se elevó en casi cuatro veces y media (se multiplicó por 5,45 veces) por la ausencia de incentivos para ponerlos en valor y la creciente presión tributaria.
/fuente: infobae.com