29 DIC 2014 Standard & Poor’s, contra otros pronósticos, estima una mejora. Efectos del gasto electoral y de un acuerdo con “holdouts” Según una calificadora, el nuevo gobierno tendrá que llevar a cabo fuertes ajustes
BUENOS AIRES.- Al revés del consenso de la mayoría de las consultoras locales y de los bancos en Wall Street, para Standard & Poor’s (S&P), 2015, el año electoral, será mejor que 2016. De hecho, en su último informe sobre las distintas economías latinoamericanas, la calificadora pronosticó un rebote del PBI argentino, que terminaría con un 2015 levemente positivo, aunque durará poco, ya que la recesión volvería a instalarse.
“Esto se debe -según la opinión de la calificadora- a los ajustes que deberá realizar la próxima administración, ante la gran cantidad de distorsiones que presenta la economía”.
“Aun cuando la situación no luzca muy atractiva -agrega-, la Argentina está en una situación mucho más favorable que Venezuela, en donde se mantiene el temor a un default si el Gobierno no toma pasos concretos para salir de la crisis”. Para justificar su postura algo más optimista, S&P mencionó el gasto electoral en el que incurrirá el Gobierno el año que viene y, eventualmente, en el acuerdo con los holdouts, algo que aún aparece como dudoso. Al menos en cuanto a las señales que dio hasta ahora el ministro de Economía de la Nación, Axel Kicillof.
El comportamiento esperado para la Argentina contrasta con el de la mayoría de la región. Casi todos los países sufrieron una baja del crecimiento este año, que daría lugar a un rebote algo tímido el año que viene, pero que sería algo más robusto en 2016. Sin embargo, S&P advirtió sobre los problemas “endémicos” de América Latina, como falta de oportunidades, nivel de educación, corrupción y desbalances fiscales crecientes, señala el diario ámbito.com.
En lo que respecta al tipo de cambio, S&P ve un fuerte salto del dólar oficial, que culminaría 2015 en niveles de $ 12,50. Sin embargo, estaría partiendo de una base con pautas diferentes a las que se manejan oficialmente hoy, ya que pronostica que 2014 culminará con un dólar a $ 9,50, más del 10% por encima del valor actual establecido por el Banco Central, que maneja Alejandro Vanoli.
S&P considera que los ajustes que deberán implementarse (por ejemplo para comenzar a equilibrar las cuentas públicas), tendrían al menos inicialmente efectos recesivos. El trabajo también analiza los efectos de la caída del petróleo en la región. Y ofrece miradas desde distintos ángulos. Por un lado, considera que “salvo Venezuela, todos los países de la región se terminarán beneficiando del petróleo más barato”. Pero enseguida advierte que se verían resentidas inversiones directas en México, Brasil y también en la Argentina si no se produce una mejora en los precios. En conjunto, S&P observa que Latinoamérica tendrá un rebote “tibio” en 2015 en relación con el menor crecimiento observado este año. A continuación, la visión sobre otros países:
• Brasil caerá un 0,2% este año para tener un “tibio” repunte el año que viene del 0,8% del PBI. De hecho, describe que tanto la Argentina como Brasil presentan como aspecto común una “persistente estanflación”.
• México es uno de los pocos países que crecieron más este año, pasando del 1,1% al 2,5%. Para 2015 se espera una mejora del 3,3% del PBI, que luego tomaría más velocidad hasta crecer al 4% en 2016, sobre todo por el efecto positivo de la mejora de la economía norteamericana.
/fuente: lagaceta.com.ar