02-OCT-2014 El prestigioso diario norteamericano considera que los inversores confían en que un nuevo gobierno, tras las elecciones de 2015, abordará los problemas económicos. En el año el Merval ganó casi 120%.
Tras una larga pausa, los inversores internacionales vuelven a apostar por la Bolsa de Buenos Aires. Confían que un nuevo gobierno, tras las elecciones presidenciales del próximo año, abordará los problemas económicos. Un reflejo de esta tendencia, es la mejora de casi 120% que lleva el Merval en lo que va del año.
Incluso la caída de 8% que registró ayer la Bolsa porteña, debido a la salida del presidente del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, ubica al principal índice bursátil en el podio con el mayor rendimiento del mundo.
La noticia es recogida por el prestigioso diario norteamericano The Wall Street Journal, donde se destaca además que más allá de “la profunda depreciación del peso este año, las acciones argentinas registran un alza de 68% en dólares”.
Para el periódico, grandes inversores como George Soros y Daniel Loeb “apuestan a que Argentina ya tocó fondo” y ven “un posible giro en las elecciones presidenciales de octubre de 2015, a las cuales Cristina Kirchner no se puede presentar”. “Los aspirantes han prometido trabajar para salir del pozo y enderezar la economía”, resalta el WSJ.
“Realizar grandes apuestas a la dirección de la política siempre es algo riesgoso, pero en este caso (…) cuesta imaginar que las cosas empeoren”, dice Sammy Suzuki, gestor de portafolio del holding AllianceBernstein, que administra 486.000 millones de dólares en activos, entre ellos acciones argentinas.
A pesar de que se estima que la economía se contraiga 2,1% este año, que la inflación es una de las más altas del mundo, y se entró en default por segunda vez en 13 años, “la popularidad de las acciones argentinas refleja la cantidad de riesgo que algunos inversionistas están dispuestos a tomar por la oportunidad de obtener grandes retornos”, sostiene el diario.
Según el WSJ, la Argentina “forma parte de un pequeño grupo de economías en desarrollo que se han vuelto populares entre los inversionistas en el último año debido a que no se han visto muy afectadas por las políticas de flexibilización monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos”.
Y además de que existen “riesgos adicionales” (pérdida de valor del peso y crisis política interna) “muchos inversionistas consideran que resistirán mejor que los mercados emergentes más grandes las alzas de las tasas de interés en EEUU, que volverán a atraer capitales a este país”.
“Para nosotros Argentina no es un lugar donde se pueda invertir porque no tenemos ninguna idea de lo que va a ocurrir”, dice Dominic Bokor-Ingram, asesor de Charlemagne Capital, quien volvió a comprar activos argentinos luego de tres años.
Las acciones energéticas como la de YPF están registrando buenos rendimientos a medida que avanza Vaca Muerta. También hay atracción por acciones de bancos como el Macro y Banco Hipotecario, destaca el WSJ.
Para concluir, el diario sostiene que los inversionistas más optimistas esperan que el próximo presidente resuelva la prolongada disputa con los holdouts, lo que le permitirá a Argentina acceder a los mercados de deuda internacionales, un paso crucial para reabastecer las reservas y fomentar el crecimiento económico.